La transición energética es el proceso por el cual las economías globales transitarán del uso de los combustibles fósiles (petróleo, gas, carbón), al uso por el de energías limpias y renovables como lo son la energía solar y la energía eólica, entre otras.
Para el año 2020, las energías renovables alcanzaron su punto de máxima rentabilidad, debido, entre otras causas, a que la industria de los combustibles fósiles estuvo afectada a causa de la crisis ocasionada por el COVID-19, de acuerdo con el informe Global Trends in Renewable Energy Investment 2020 publicado el 10 de junio del mismo año por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente.
Las energías renovables han ido captando una parte dominante del mercado de generación de electricidad con combustibles fósiles, en dicho contexto, en gran parte del durante el 2019 se marcaron muchos otros récords, según lo reseña el informe citado